Desayunar elimina la flacidez de la piel

Hola a todos!! Digo todos porque espero que algún chico nos esté leyendo también por el blog. Si es así, no seas tímido y saluda, hombre!!

Bromas aparte…., hoy quiero hablaros en el post de lo importante que es desayunar. Y no solo para mantenernos más energéticos todo el día y más saludables, sino porque desayunar bien combate la flacidez y la celulitis.

Si guapetonas, como lo oís. Si desayunamos bien todas las mañanas el porcentaje de mantener una piel jovial, tersa y sana será mucho mayor que si no desayunamos diariamente.

Y no me quiero referir a un desayuno de un café y una galleta y hasta luego Lucas. No, no. Un buen desayuno se compone de varios puntos que son:

- - Zumo de frutas o una pieza de fruta

- - Un vaso de leche desnatada o de soja. Café si sois muy adictas y necesitáis una buena taza diaria para despertaros.

- - Un poco de proteínas animales (jamón de york, jamón, huevos revueltos,…)

- - Trozo de pan integral

Pues ahí tenéis la base de un buen desayuno que nos ayudara a mantener la pérdida del colágeno a raya que es lo que hace que la elasticidad de nuestra piel disminuya y aparezcan las arrugas, flacidez, envejecimiento, celulitis,….

¿Y por qué ocurre esto?

Pues muy sencillo, veréis. Si no añadimos nutrientes a nuestro organismo, éste empezará a gastar proteínas para poder seguir realizando los procesos metabólicos necesarios para la vida. Y las proteínas son la base fundamental para mantener la piel firme y bella, entre otras. Por lo tanto perdemos el colágeno que sustenta la firmeza de la piel.

Además, otro punto importante para hacer un buen desayuno es evitar la ansiedad. Si por la mañana no tomas los nutrientes necesarios, nuestro cerebro se da cuenta y a media mañana nos entraran unos ataques feroces de hambre y al final caeremos en la tentación y comeremos lo primero que pillemos. Que en muchos casos suele ser chocolatinas, patatas, dulces, etc…. Que nos creará mucha más ansiedad por culpa de la cantidad de azúcar que contienen y acabaremos en un círculo totalmente vicioso.